Abstract:
La enfermedad renal crónica representa un grave problema de salud pública a nivel
mundial debido a su alta prevalencia, mortalidad y su impacto negativo en la calidad
de vida de los pacientes. La importancia epidemiológica se relaciona por su incremento
en la prevalencia, asociada a disminución en su calidad de vida, elevada
morbimortalidad. El objetivo fue Identificar la calidad de vida de los pacientes adscritos
al servicio de hemodiálisis. Se realizó un estudio observacional, descriptivo,
transversal y analítico, entre enero y febrero de 2025. La muestra incluyó a 176
pacientes seleccionados mediante muestreo no probabilístico basado en criterios de
inclusión predefinidos. Se aplicó el cuestionario kidney disease quality of live- 36
version1.3. Los datos fueron analizados mediante estadísticas descriptivas y pruebas
de correlación utilizando IBM SPSS Statistics 25.0. Se consideraron significativos los
valores de p < 0.05. La mediana de edad de los participantes fue de 53 años (IQR 41
66), predominando el género masculino (54%). El 40.9% de los pacientes tenía
antecedente de diabetes mellitus y el 68.2% hipertensión arterial. La mediana del
tiempo en hemodiálisis fue de 3 años. Los dominios con mayores puntajes medianos
fueron los síntomas de la enfermedad (77.1), el sueño (62.5) y la satisfacción del
paciente (83.3), indicando una percepción relativamente positiva en estos aspectos.
En contraste, los dominios más afectados fueron la función cognitiva (20.0), la calidad
de la interacción social (26.7) y la vida sexual (0.0). Se observó una fuerte correlación
positiva entre los síntomas de la enfermedad y el sueño (r = 0.784, p < 0.001) y una
correlación negativa entre los síntomas y la función cognitiva (r = -0.662, p < 0.001).
Los pacientes en hemodiálisis experimentan un deterioro significativo en los dominios
sociales, sexuales y cognitivos, lo cual impacta su calidad de vida. La edad y el tiempo
en hemodiálisis son factores clave asociados a menores puntajes en aspectos de
soporte social y satisfacción general. Este estudio destaca la necesidad de
implementar estrategias de atención multidisciplinaria enfocadas en el soporte social,
psicológico y médico para mejorar su bienestar.