Abstract:
Introducción:
El dolor postoperatorio secundario al procedimiento quirúrgico y a sus complicaciones,
se caracteriza por ser un dolor agudo, limitado en el tiempo, predecible y evitable. El
sobrepeso y la obesidad, definidos como índice de masa corporal ≥25 y ≥30 kg/m2
respectivamente, son un problema de salud pública que, aunque no guardan una relación
directa con el dolor, pueden constituir un factor de riesgo importante para la dificultad en
su manejo, en virtud de la facilitación para la producción de mediadores inflamatorios que
comprometen el adecuado desempeño de los mecanismos de acción de una gran
variedad de analgésicos. Debido a lo anterior, es necesario considerar el peso real de la
paciente para proporcionarle la mejor técnica analgésica multimodal correspondiente.
Objetivo general:
Evaluar la correlación entre el índice de masa corporal y la intensidad del dolor
postoperatorio a las 24 horas, evaluado con el cuestionario internacional de resultados
(IPO) en pacientes con cirugía abdominal Ginecoobstétrica, de la base de datos Pain
Out.
Diseño de estudio:
Estudio transversal analítico retrolectivo. Se recolectarán datos de la base de datos de
Pain Out, incluyendo pacientes ASA II Y III, que fueron atendidas en el área de
ginecología y obstetricia del Hospital Central “Dr. Ignacio Morones Prieto” para su
abordaje quirúrgico abdominal para analizar la correlación del índice de masa corporal
preoperatorio con la dificultad para el control del dolor a través del cuestionario IPO
aplicado a las 24 horas postoperatorias.
Resultados:
De las 182 pacientes analizadas, el 65% fueron obstétricas y el 35% ginecológicas, con
una mediana de edad de 31 años, solo el 37.3% se reportó con un IMC elevado, siendo
20.3% con sobrepeso y 17% con algún grado de obesidad; La mediana del peor dolor
experimentado fue un ENA de 5 con una frecuencia del 30% en las primeras 24 horas.
Dada la falta de normalidad de las variables, la correlación entre los parámetros
anteriores se analizó por Rho de spearman, obteniendo una Rho de -0.04, que nos indica
la falta de correlación o muy pobre correlación entre el peor dolor y el índice de masa
corporal de las pacientes de la muestra.
Conclusiones:
En el presente estudio no se observó una clara relación entre el índice de masa corporal,
específicamente el que se clasifica como obesidad, y el grado de dolor de las pacientes
encuestadas. Sin embargo, comprender esta conexión es crucial para desarrollar
estrategias de prevención y tratamiento efectivas. La personalización del enfoque de
manejo del dolor, teniendo en cuenta la diversidad de pacientes y procedimientos, es
esencial para mejorar la recuperación y la satisfacción del paciente en el ámbito
ginecobstétrico