Resumen:
Las infecciones de transmisión sexual (ITS)1, son grupos de enfermedades
infectocontagiosas que generalmente se adquieren y transmiten a través de contacto
sexual. Estas enfermedades pueden tener su origen por bacterias, virus, hongos o
parásitos, y pueden ser transmitidas por más de 20 agentes patógenos diferentes. Uno
de ellos es el Treponema pallidum, que causa tanto la sífilis adquirida como la
congénita.
El Treponema pallidum es una bacteria Gram negativa de la familia Spirochaetaceae,
con forma de espiral, y una longitud de 6 a 15 μm y un ancho de 0.2 μm2. Aunque
carece de lipopolisacáridos en su membrana externa, está formada por numerosas
lipoproteínas que se encuentran principalmente bajo la superficie, lo que hace que sea
capaz de evadir los mecanismos de la respuesta innata del huésped, facilitando su
replicación local y propagación temprana3. El ser humano es su único huésped natural
y produce lesiones sifilíticas en quienes la padecen.