Resumen:
Introducción:
La incontinencia urinaria se incrementa progresivamente con la edad, con un pico de frecuencia entre los 50 y los 60 años, alrededor de la menopausia en las mujeres y otro pico a partir de los 70 años. Se han identificado factores ligados al envejecimiento, fisiológico y patológico que con mayor frecuencia predisponen a la incontinencia urinaria
El envejecimiento de la población conlleva la presencia de una comorbilidad variable, que en mayor o menor medida, va a afectar a la salud y a la calidad de vida. En ancianos con incontinencia no sólo hay más quejas y de mayor intensidad sobre otros aspectos de la salud general, sino que además la cantidad de problemas de salud, aumenta con el tipo de incontinencia urinaria. Se ha visto que, los ancianos con incontinencia de cualquier tipo, suelen presentar algún tipo de aislamiento, necesitan más ayuda en la realización de las actividades de la vida diaria, tiene menos contactos sociales y menor calidad de vida.
Los factores de riesgo relacionados con la IU y concluyeron que los factores de riesgo conocidos para su desarrollo son multifactoriales: la edad, el índice de masa corporal (IMC) excesivo, antecedentes de traumatismos e infecciones perineales, la falta de actividad física (AF) y la presencia de déficits cognitivos, diabetes o enfermedades pulmonares, cirugía, multiparidad; entre otros.
Con el envejecimiento, la relación entre el IMC y la incontinencia puede volverse más compleja, con cambios en la composición corporal y la distribución del tejido adiposo jugando un papel cada vez más importante en la determinación del riesgo de incontinencia. En los adultos mayores, un IMC más bajo puede asociarse paradójicamente con un mayor riesgo de otros resultados adversos, como discapacidad y muerte, si el peso más bajo representa principalmente masa muscular baja en lugar de, o además de, baja masa grasa. El bajo peso puede a su vez estar asociado con un mayor riesgo de incontinencia si se asocia con una disminución en la fuerza superior e inferior del cuerpo que contribuye a la fragilidad en los adultos mayores e interfiere con los hábitos normales de uso del baño.
Objetivo: Evaluar la relación del índice de masa corporal y factores relacionados con Incontinencia urinaria en población geriátrica.
Sujetos y métodos: Estudio transversal analítico que cumplían las criterios de inclusión, para analizar la asociación de las variables con el grado y presencia de incontinencia urinaria. Se emplearon modelos lineales múltiples y logística múltiple con el programa R 3.4.3 al 95% de nivel de confianza.
Resultados: El total de los población fue de 1715, de éstos 1443 pacientes no presentaron datos de incontinencia urinaria y 272 sí. La edad promedio fue de 71.7 años± 8.2 años, el sexo predominante fue el femenino con 954 mujeres y 761 hombres. Se encontraron 387 pacientes con DM y 1328 sin la misma. Se midieron los niveles de glucosa encontrando a 207 pacientes con glucemias superiores a 200mg/dl. La cantidad de pacientes se encontraron con IMC normal con 710, siguiendo el sobrepeso y obesidad con 640 y 262 respectivamente; la media de IMC fue de 25.7. En cuanto al sexo no hubo alguna significancia estadística, con una p= 0.197.
Conclusiones: La presencia de Incontinencia Urinaria y los factores de riesgo que se asociaron de manera importante fueron el IMC cada unidad que incrementa, aumenta en 3.9% el odds de incontinencia esperado, con un IC 95% (0.7%-7.2%) con una p= 0.01481. La presencia de DM y su asociación con Incontinencia se encontró en un 68% con un IC 95% (24.7%-127%) y una p= 0.00061. Tambien se encontró que cada unidad que aumenta la edad se asoció la presencia de incontinencia urinaria en un 5.2%, con IC 95% (3.5%-6.9%) y una p= 7.9 e-10.