Abstract:
Introducción: Una fractura expuesta es aquella en la que existe una disrupción o penetración de la piel, lo que provoca la exposición de la fractura al entorno externo, generalmente acompañada de lesiones de gravedad variable en tejidos blandos (1). Esto incluye cualquier hueso del cuerpo que este expuesto al ambiente exterior a través de una herida de cualquier tamaño.
Las fracturas producidas por proyectiles de arma de fuego son uno de los principales mecanismos.
Según la CDC para 2010, se estimó una incidencia de 18 / 100000 agresiones por arma de fuego en Estados Unidos. Se reportan fracturas en extremidades superiores e inferiores entre 45% y 47% (25).
En un estudio retrospectivo realizado en el Hospital infantil del Estado de Sonora de 1988 a 1998 se registraron 344 lesiones por proyectil de arma de fuego. Encontrándose un 41.2% de lesiones en el ámbito ortopédico. Todos ellos menores de 18 años (26).
Entre 2000 y 2002 se realizó un estudio epidemiológico en el Hospital Sharp de Mazatlán Sinaloa, en el que se atendieron 30 pacientes con 106 impactos en total, de los cuales ameritaron 97 procedimientos quirúrgicos; de los cuales el servido de traumatología y ortopedia con 24 pacientes a quienes realizaron 32 lavados mecánicos, 6 esquirlectomías y 10 osteosintesis
En la población militar se ha estudiado esta incidencia como lo muestra un estudio retrospectivo a 5 años de 2006 a 2011, con una incidencia de 246 pacientes de los cuales 45% presentaron algún tipo de fractura (28).
Objetivo: conocer la frecuencia de fracturas expuestas por arma de fuego en el Hospital Central ¨Dr. Ignacio Morones Prieto¨ durante el periodo enero 2015 a octubre 2018, derivado de esto conocer la morfología mas frecuente, el hueso y segmento más afectado, así como el tratamiento realizado y las complicaciones secundarias a este tipo de lesiones.
Material y métodos: Se realizará un estudio ecológico de incidencia. Se revisarán todos los expedientes de pacientes con diagnostico de fractura por arma de fuego que hayan sido atendidos en el Hospital Central ¨Dr. Ignacio Morones Prieto¨ durante el periodo enero 2015 a octubre 2018.
Resultados: Se encontró mayor frecuencia en el sexo masculino en este caso representan un 100% de la población estudiada. La edad media de los pacientes atendidos fue de 28.4 años, que va desde los 13 hasta los 57 años.
La mayoría de ellos con un 89% se reportaron sin comorbilidades, mientras que la afección más común fue el abuso de sustancias con un 7.2%.
El hueso más afectado fue el fémur con un 27.2%, seguido del humero con un 21.8%, además de un 27.2% que presentaron fracturas múltiples. El segmento anatómico más afectado fue la diáfisis 67.9% y en segundo lugar la metáfisis con un 20.7%.
De acuerdo con la clasificación AO, el patrón más común fueron el tipo A con un 45.4%, seguido del tipo C en un 34.5% y el tipo B en un 20%.
El grado de exposición de la fractura de acuerdo con Gustilo se encontró con mayor frecuencia el tipo IIIA con 47 pacientes (87.4%), un paciente con lesión tipo IIIB, 3 pacientes con fracturas múltiples y 4 pacientes con lesiones tipo IIIC.
Toda lesión tipo IIIC secundaria a lesión nerviosa en 3 pacientes con lesión de nervio radial y en 1 con lesión de nervio radial y nervio mediano.
En el nocturno se atendió el 52.7% de los pacientes
74.5% requirió tratamiento quirúrgico; a 38.1% se realizó aseo y fijación externa, a otro 38.1% aseo y reducción abierta con fijación interna y a 16.3% aseo quirúrgico únicamente.
Con una estancia promedio de 9.5 días, con periodos desde un día hasta 54 días de internamiento, de los cuales la mayoría de los pacientes permanecieron 5 días hospitalizados (14).
Conclusiones: Por lo anterior podemos decir que las fracturas ocasionadas por arma de fuego en el Hospital Central ¨Dr. Ignacio Morones Prieto¨ genera una alta morbilidad ya que la mayoría de estas afectan huesos largos, principalmente fémur y humero, además de que por las áreas afectadas requieren de un tratamiento quirúrgico complejo ya que solo en un 38% se pudo realizar una fijación inicial definitiva. Esto ocasiona un elevado número de días de internamiento y eleva los costos de la atención hospitalaria.