Resumen:
Introducción: Al valorar a un adulto mayor es necesario hacerlo de manera integral, identificando problemas físicos, psicológicos y sociales, el profesional de enfermería debe brindar adecuada atención a esta población, utiliza una herramienta de valoración por patrones funcionales de Marjory Gordon y valoración básica geriátrica. Justificación y planteamiento: El proceso enfermero: es un proceso de pensamiento crítico, que proporciona cuidados, promueve funciones y respuestas humanas a la salud y enfermedad; la valoración es la primera etapa del proceso, permite estimar el estado de salud, debe ser total, integradora y holística. Marco teórico: La valoración por patrones funcionales tiene consideraciones especiales, se obtiene a través de la historia de enfermería y el examen físico, contiene datos relevantes (físicos, psíquicos, sociales, del entorno), es ordenado, lo que facilita su análisis. La valoración geriátrica comprende un proceso dinámico, estructurado que permite detectar, cuantificar los problemas, necesidades y capacidades del adulto mayor, en las esferas clínica, funcional, mental y social. Se hizo integración de ambas valoraciones para proponer un formato de enfermería del adulto mayor. Conclusión: El objetivo de la valoración enfermera, es su actuar, este deberá estar orientado a la prevención y/o mantenimiento de la capacidad funcional, el área mental y social. Una buena valoración permite identificar situaciones que estén ajenas a un buen envejecer y así brindar atención adecuada.