Resumen:
La vivienda debe verse como un sistema creado para la habitabilidad. En este sistema son importantes tres elementos: El espacio arquitectónico de la vivienda, el sistema de los objetos, con el que se organiza el espacio y, los usuarios o habitantes. Para que el sistema de vivienda funcione adecuadamente, el espacio de vivienda y el sistema de los objetos, donde se incluye al mobiliario para el hogar, deben ser compatibles con las necesidades físicas y psicológicas de los usuarios. Con las recientes configuraciones de vivienda mínima unifamiliar, habitada principalmente por familias nucleares, es decir, por padres o tutores e hijos, se ha modificado el espacio tradicional de vivienda. Esto ha generado nuevas maneras de habitar un hogar. Sin embargo, el mobiliario del mercado local actual se sigue diseñando y fabricando para espacios tradicionales, inclusive si se vende para su utilización en espacios reducidos. Esta situación ha provocado un desfase entre la compatibilidad del espacio de la vivienda mínima y el mobiliario que se utiliza en sus interiores, debido principalmente a la falta de comprensión de las necesidades espaciales físicas y emocionales, específicas de sus habitantes y usuarios.
Para analizar y comprender la relación entre sistema de los objetos y espacio de vivienda de los casos analizados, se hicieron mediciones sobre lo siguiente: Primero, sobre la relación de uso entre habitantes y el espacio interior de las viviendas analizadas. Con el objetivo particular de comprender el uso del espacio arquitectónico de la vivienda por sus habitantes y, las necesidades específicas de éstos últimos. Segundo, sobre la relación de uso entre el sistema de los objetos y las actividades que se realizan sobre su superficie útil. Con el objetivo particular de medir que tan óptimo es el mobiliario para el hogar existente en las viviendas analizadas, para la solución de las necesidades específicas de sus usuarios. Y tercero, sobre la relación de uso entre el espacio arquitectónico y el sistema de los objetos. Con el objetivo particular de medir la compatibilidad del mobiliario con su uso espacial.
De los resultados obtenidos en este estudio se ha concluido que el mobiliario para el hogar existente en las viviendas analizadas tiene problemas de compatibilidad con los espacios en los que se utilizan. Esto se debe a que no se han hecho estudios para la comprensión de las necesidades específicas de los habitantes.