Resumen:
La actividad turística en la Zona Altiplano de San Luis Potosí, es más reducida que en la Zona Huasteca, ya que muy pocos municipios cuentan con los servicios mínimos para atender a los visitantes. Reyna (2011) indica que las características particulares del municipio de Guadalcázar le confieren un gran potencial turístico el cual puede llegar a ser una actividad básica para el sustento de la población en los próximos años, pero que actualmente está siendo escasamente aprovechado por sus pobladores.
El tipo de turismo que se lleva a cabo en El Realejo es el de aventura, el cual tiene requerimientos específicos para llevar a cabo sus actividades. Para su realización es necesario tener una planeación adecuada, lo que contribuye a mitigar los posibles impactos negativos que se pudieran llegar a generar (Rueda y Belmonte, 2004).
Metodología. Para entender la situación del turismo en El Realejo y lograr una propuesta acorde a las características de la zona se realizó un inventario de atractivos y se valoraron siguiendo la metodología de Franco-Maass et al. (2009). Así mismo, se realizó la propuesta de dos senderos interpretativos y se evaluó su capacidad de carga. Posteriormente se realizaron entrevistas para conocer el perfil del turista y el perfil de los residentes. Resultados y discusión. Se describieron un total de ocho sitios y se clasificaron en tres grupos según su valor: poco adecuados; adecuados y muy adecuados. Se propusieron dos senderos interpretativos: el Camino Real El Realejo- Guadalcázar y el sendero Cerro de Las Comadres, el primero con una CCR de 1159 visitas/día y el segundo de 545 visitas/día, una CCR alta al compararla con los senderos en Cehegín reportados por Tudela (2008). Las entrevistas a los turistas muestran que son turistas de aventura, que viajan con amigos en auto particular, en grupos de 4 personas, acampan y gastan poco, lo cual difiere con lo que reporta el POSLP (2010) que indica que lo que más se realiza en el Altiplano es el turismo cultural, los turistas van acompañados de su familia y se hospedan en hoteles, esto debido a que el estudio está enfocado a la zona de Real de Catorce. La entrevista a los residentes refleja que El Realejo se encuentra en una etapa de implicación en el ciclo de vida del destino, y el índice de irritación indica que se encuentran en la fase de euforia. Existe en el lugar una falta de unión en la comunidad, lo que se ve reflejado en la disminución de algunas tradiciones.